Acerca de este blog

Este blog aborda los descubrimientos de planetas desde una perspectiva amena y sencilla, pero siempre precisa y contrastada, para una lectura agradable.

28 noviembre, 2010

Sobre cómo descubrimos planetas…

 
En una publicación anterior escribíamos qué eran los exoplanetas y, si aún se tienen dudas, esperamos que este blog pueda aclararlas a todo el mundo. Pues al fin eso es lo que buscamos en este blog, que todo el mundo sepa la importancia de los actuales descubrimientos que se hacen en lugares tan lejanos que, simplemente, no podemos verlos.

Efectivamente, muy pocos de los planetas que conocemos actualmente han sido vistos directamente por los ojos de la humanidad. Ya que éste es, por mucho, el método más tradicional de detección de planetas… y que se pierde en la prehistoria.

En aquellos tiempos, los primeros nobles ociosos de nuestra especie comenzaron a ver esos puntos de luz sobre sus cabezas de una forma diferente. Primero vieron que podían orientarse en las noches, mientras cazaban, siguiendo unas formas reconocibles en lo alto. La primera de ellas es la de tres puntos seguidos que luego conformaría la constelación del cazador, más conocida actualmente como Orión.

Orion

Tres puntos cerca del ecuador son conocidos como el Cinturón de Orión. Se pueden ver durante medio año, especialmente en invierno. Hoy puede comenzar a verse entre las 9:00 y 9:30 por el Este, por donde sale el Sol. Imagenes propiedad de Stellarium.

Pero pronto se dieron cuenta que no todos esos puntos les servían de referencia, pues habían algunos puntos que no se movían en consonancia con los demás. Pues conforme pasaban los días se iban trasladando, poco a poco, de un sitio a otro. Así comenzó a hablarse de los planetas, que en griego (la primera cultura científica de la humanidad) significaba Errantes o Vagabundos.

Simulación a alta velocidad del planeta Júpiter y otros planetas del cielo, según su concepción original. El objeto grande que aparece esporádicamente es la Luna, y la línea blanca es nuestro horizonte (se ha eliminado el suelo para seguir a Júpiter en todo su recorrido).

Luego descubrimos hace unos pocos siglos que el comportamiento que hay en esos puntos luminosos es en realidad el mismo que el que hay aquí… Sólo que aquello contradecía el sentido común… si en realidad fuera así, esos puntos deberían caerse sobre nosotros…

Pero gracias a la maravilla del ingenio humano pudimos hacer dos cosas importantísimas: una práctica, el telescopio, y una teórica, la ley universal de la gravedad. Sobre la gravedad puede leerse en cualquier sitio de Internet, o en mi publicación sobre qué es un exoplaneta. Y sobre el telescopio poco puede decirse ya que no se sepa o no pueda preguntarse en cualquier tienda que lo venda. Se trata básicamente de un tubo con varios cristales, llamados lentes, que deforman la luz que se recibe de un lado para concentrarla en el otro punto y así "aumentar” la imagen muchas veces más de lo que vería el ojo humano sin ninguna ayuda.

Entonces descubrimos que casi todos esos puntos eran como el inmenso Sol que nos ilumina durante el día, pero tan lejos que sólo se veían como esos puntitos. Y los cuerpos que se movían eran en realidad otros mundos como la Tierra que giraban, al igual que ésta, sobre el Sol. Este movimiento es uniforme y suave, aunque veloz e imperceptible, porque los mundos “flotan” en el vacío, que no genera resistencia (a diferencia de la atmósfera). Y se atraen entre sí por la gravedad, un fenómeno que sí es perceptible, pues nuestros océanos se levantan literalmente cuando se encuentran más cerca del Sol y de la Luna, el cuerpo más masivo y el mas cercano a la Tierra, respectivamente. Y ese levantamiento, conocido como marea es debido a esa atracción que llamamos gravedad, y que nos mantiene pegados al suelo.

Entonces, gracias al telescopio, La Luna y el Sol dejaron de considerarse planetas, pues pertenecían a categorías nuevas, llamadas satélites y estrellas respectivamente. Y se descubrieron nuevos planetas, que hasta entonces eran Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno; los únicos planetas hallados por el método de detección más directo que hay, el ojo desnudo. Entonces descubrimos a Urano, a Neptuno, y a los planetas enanos Ceres, Plutón, Makemake, Haumea, Eris y otros planetas que por su lejanía o pequeño tamaño se hacían imposibles de ver a simple vista.

250px-The_Sub-Stellar_Companion_to_GQ_Lupi

La estrella GQ LUPI y planeta compañero, llamado de forma científica como GQ LUPI b

Desde entonces los telescopios se han mejorado tanto que hace menos de dos décadas hemos comenzado a ver los planetas que giran en torno a otros soles, a las otras estrellas que flotan en la lejanía de la noche. Pero sólo hemos logrado ver un pequeño puñado, pues el brillo de sus estrellas nos impide verlos. Algo parecido pasa en nuestras propias calles, donde el brillo de todas las luces de la ciudad nos impide ver a las estrellas mismas. Ello nos obliga a irnos a descampados lejos de la urbe para poder observarlas. Cosa que antes del descubrimiento de la bombilla nunca se hubiera considerado.

Por ello, y debido a las dificultades que plantea la observación directa de planetas (dificultades que sin embargo son superables, pero requieren un enorme esfuerzo económico), los astrónomos han comenzado a emplear métodos indirectos para llegar a saber dónde hay un planeta… y saber todo lo que se pueda sobre los mismos.

Estos métodos hacen uso de otros efectos producidos por la presencia de un planeta, diferentes al efecto visual que tiene el “verlos con los propios ojos”. Pues nosotros para ver las estrellas podemos alejarnos de la ciudad, pero para ver los planetas no podemos alejar a estos de su estrella… ¿alguna vez has intentado mover al Mundo? pues físicamente es casi imposible.

El principal efecto indirecto producido por un planeta es el de la gravedad. Así como la Luna y el Sol atraen a la Tierra, ésta hace lo mismo sobre ambas… ¡Por eso se llama Ley Universal de la Gravedad!, ¡se aplica a todos los cuerpos!… Lo único es que el objeto más grande siempre hace mover más al más pequeño, por lo que el efecto del pequeño sobre el grande es, efectivamente, pequeño, de allí que la luna, más pequeña que la Tierra, gire sobre nosotros, y no nosotros sobre ella.

Sin embargo, el punto de la Tierra sobre el que giramos alrededor el Sol no es precisamente el centro de la Tierra, sino que está a 4.670 kilómetros de éste ¿Cómo es eso posible? Esa diferencia es debida a la atracción de la Luna sobre nosotros… y que genera un efecto sobre nuestro mundo

El objeto Grande es la Tierra, y el pequeño la Luna. Y lo rojo es el punto donde ambos giramos sobre del Sol.

Pues eso mismo le hacemos nosotros a nuestro Sol, y todos los planetas al Sol… y todos los planetas extrasolares a sus respectivos soles. Así que si podemos medir con suficiente detalle los extraños movimientos periódicos que hace una “estrella fija” en el firmamento, podemos llegar a saber, no sólo que tiene uno o varios planetas, sino a que distancia de la estrella, y que tan grandes o masivos son estos.

Ese es el principal método por el que hemos descubierto la mayoría de los planetas conocidos a día de hoy, y que se llama Método de la velocidad radial.

Conocemos cientos de planetas, gracias a que estos son inmensos y están lo suficientemente cerca de su estrella para que el efecto sea tan grande que podamos medirlo con nuestros sencillos y básicos aparatos actuales, comparados con los que se fabricarán en varios siglos. Y es que cualquier telescopio infantil actual es tan bueno o mejor que el que usó Galileo Galilei para hacer los descubrimientos que mencionamos al principio, y que cambiaron nuestra forma de ver nuestro entorno.

Telescopios y programas de medición más elaborados, complejos y potentes nos harán detectar planetas más pequeños y alejados de su estrella… hasta que un día descubramos planetas como Plutón en estrellas como nuestro Sol.

El segundo método actual más fructífero es el del Tránsito, que básicamente detecta los mini-eclipsesproducidos cuando un planeta se atraviesa entre su estrella y nosotros. Es comprensible que el número de planetas que casualmente se encuentran en la trayectoria entre su estrella y nosotros es muy bajo. Pero tomando en cuenta que existen cientos de miles de millones de estrellas observables por nuestros telescopios… simplemente es cuestión de observar un buen puñado de éstas y esperar a ver que pasa…

Actualmente existen telescopios, tanto en tierra como en el espacio, observando pacientemente un pedazo de cielo a ver como se disminuye el brillo de alguna estrella de forma repetida. El más moderno es el telescopio espacial Kepler, que se espera que nos devele cientos o miles de planetas cuando se publique el informe de sus responsables científicos. Los primeros planetas que se descubren así son, nuevamente, los más Grandes y Cercanos a su estrella. Pues opacan más a ésta y tardan menos tiempo en dar la vuelta alrededor. Pero con más tiempo de observación, se pueden detectar igualmente planetas alejados y, a diferencia de la velocidad radial, podemos conocer otras cosas del planeta, como la composición principal de su atmósfera, y el diámetro mismo del planeta.

Y algunos se preguntarán “¿Porque si podemos detectar los eclipses no podemos ver al mismo planeta?” la respuesta es que, de hecho, los eclipses son tan suaves que no se pueden ver al ojo, ni siquiera usando los telescopios. Pero nuevamente el ingenio humano nos saca de apuros, así como el telescopio en su momento, ahora poseemos dos herramientas que nos ayudan en su detección, una es el fotómetro, que detecta y calcula a un nivel increíble la cantidad de luz que recibe, a un nivel que nuestro cerebro simplemente es incapaz de detectar.  Y la otra herramienta es el software informático. Los ordenadores son muy buenos, ya lo sabemos, en hacer complejos cálculos matemáticos que permitan “arrojar luz” sobre lo que un fotómetro nos dice que detecta en un largo lapso del tiempo.

Otros métodos que han tenido éxito, aunque sea en menor tamaño, o sólo para una clase especial de planetas, son el de la astrometría, el Microlente Gravitacional (Planetas muy alejados de sus estrellas, que están, a su vez, muy alejadas de nosotros), las Perturbaciones Gravitacionales en Discos de Polvo (Planetas en formación), la medición de pulsos de radio en pulsares (remanentes de estrellas muertas) y las binarias eclipsantes (un planeta que orbita una pareja de estrellas).

Estos métodos los consultaremos más adelante. Pues cada uno requiere exponerlos adecuadamente.

23 noviembre, 2010

OGLE-2005-BLG-390Lb un planeta helado…

Me gustaría llamarlo Libra, para hacerlo más fácil de nombrar, pero no soy su descubridor ni pertenezco a ninguna sociedad planetaria, así que el por ahora OGLE-2005-BLG-390Lb es un planeta pequeño, muy alejado de su estrella, y por tanto, un planeta helado.

Orbitando una estrella enana roja (las estrellas más pequeñas, estables y abundantes del universo) con un nombre también impronunciable (OGLE-2005-BLG-390L), este planeta fue confirmado en 2006 en una órbita de 2,5 veces la de la Tierra al sol (UA); lo que ya le hacía notorio, pues hasta el momento el planeta más alejado de su estrella que conocíamos fuera del Sistema Solar  se encontraba a 0,15 UA. Lo que es lo mismo que decir que hasta entonces todos los planetas que orbitaran estrellas estaban tan pegados a éstas que literalmente se estaban friendo (salvo unos tres  planetas orbitando un cadáver de estrella, a los que llamamos pulsar, que se encontraban, el más distante, a 0,46 UA…

En todo caso, este pedrusco que está flotando en algún lugar sobre nuestras cabezas, despertó la imaginación de unos cuantos científicos, pues posee entre dos y siete veces la masa de la Tierra, osea que es… una superTierra! si, esa es la categoría oficial para este tipo de planetas. Pero la historia no acaba allí, debido a que está tan lejos de una estrella tan pequeña, y a que es tan “pequeño” (de hecho fue el más pequeño descubierto en su momento), el Innombrable es, para todos los efectos, un Plutón con esteroides, o quizá un Titán rico en metano y otros productos de su clase, si fuera el caso que en su formación le hubiera llovido bastante de aquello; cosa que no sabremos hasta que mis hijos que aún no tengo estén bastante mayorcitos, viendo como está la economía en este realmente pequeño planeta…

PD: Para los que les interese ir a visitar a los “Libranos”, está a 20.000 años-luz en dirección al centro de nuestra galaxia, en mi querida constelación de Sagitario (cumplo el 8 de diciembre… aunque crea menos en los astrólogos que en las hadas y en sus cuentos).

¡Ah! y algo realmente importante, el planeta fue el primero es demostrar el método de detección por los microlentes gravitacionales (y demostró los microlentes mismos). Algo parecido al efecto de espejismo en una carretera larga (si Einstein me oyera se levanta de su tumba y se vuelve a morir) por el que la gravedad del planeta desvía la luz de una estrella mucho más lejana, haciendo que se vea en dos puntos distintos del cielo (en el que realmente “está” y el de la luz desviada), tal como en un espejismo realmente vemos el azul del cielo rebotando en la calle y llegándonos ese condenado azul por debajo del horizonte que nos hace creer que es agua… Así que, cuando vean un espejismo, acuérdense de OGLE-2005-BLG-390Lb… estoy seguro que lo harán…

OGLE-2005-BLG-390Lb un planeta helado…

Me gustaría llamarlo Libra, para hacerlo más fácil de nombrar, pero no soy su descubridor ni pertenezco a ninguna sociedad planetaria, así que el por ahora OGLE-2005-BLG-390Lb es un planeta pequeño, muy alejado de su estrella, y por tanto, un planeta helado.

Orbitando una estrella enana roja (las estrellas más pequeñas, estables y abundantes del universo) con un nombre también impronunciable (OGLE-2005-BLG-390L), este planeta fue confirmado en 2006 en una órbita de 2,5 veces la de la Tierra al sol (UA); lo que ya le hacía notorio, pues hasta el momento el planeta más alejado de su estrella que conocíamos fuera del Sistema Solar  se encontraba a 0,15 UA. Lo que es lo mismo que decir que hasta entonces todos los planetas que orbitaran estrellas estaban tan pegados a éstas que literalmente se estaban friendo (salvo unos tres  planetas orbitando un cadáver de estrella, a los que llamamos pulsar, que se encontraban, el más distante, a 0,46 UA…

En todo caso, este pedrusco que está flotando en algún lugar sobre nuestras cabezas, despertó la imaginación de unos cuantos científicos, pues posee entre dos y siete veces la masa de la Tierra, osea que es… una superTierra! si, esa es la categoría oficial para este tipo de planetas. Pero la historia no acaba allí, debido a que está tan lejos de una estrella tan pequeña, y a que es tan “pequeño” (de hecho fue el más pequeño descubierto en su momento), el Innombrable es, para todos los efectos, un Plutón con esteroides, o quizá un Titán rico en metano y otros productos de su clase, si fuera el caso que en su formación le hubiera llovido bastante de aquello; cosa que no sabremos hasta que mis hijos que aún no tengo estén bastante mayorcitos, viendo como está la economía en este realmente pequeño planeta…

PD: Para los que les interese ir a visitar a los “Libranos”, está a 20.000 años-luz en dirección al centro de nuestra galaxia, en mi querida constelación de Sagitario (cumplo el 8 de diciembre… aunque crea menos en los astrólogos que en las hadas y en sus cuentos).

¡Ah! y algo realmente importante, el planeta fue el primero es demostrar el método de detección por los microlentes gravitacionales (y demostró los microlentes mismos). Algo parecido al efecto de espejismo en una carretera larga (si Einstein me oyera se levanta de su tumba y se vuelve a morir) por el que la gravedad del planeta desvía la luz de una estrella mucho más lejana, haciendo que se vea en dos puntos distintos del cielo (en el que realmente “está” y el de la luz desviada), tal como en un espejismo realmente vemos el azul del cielo rebotando en la calle y llegándonos ese condenado azul por debajo del horizonte que nos hace creer que es agua… Así que, cuando vean un espejismo, acuérdense de OGLE-2005-BLG-390Lb… estoy seguro que lo harán…

14 noviembre, 2010

Destruyendo afirmaciones estúpidas: El sol es frío (parte 2)

Al ser tan largo el artículo, he decidido dividirlo en 2 partes, para que no presente problemas… Bueno, sigamos.

Afirmación número 3:

Si el espacio es frío,  ¿cómo entonces los científicos miden la temperatura del sol?  Los científicos miden la temperatura sobre el sol examinando su color.  Justo como una barra de hierro caliente cambia de color rojo a "blanco" a medida que se calienta la barra.  Para mí esto es la misma cosa que concluir que el sol rota alrededor de la Tierra porque parece elevarse en el Este y ponerse en el Oeste, o que la Tierra es plana por la forma en que se mira desde la superficie. Porque el hierro cambia de color cuando se calienta, y porque vemos esos colores del hierro calentado en el sol, la conclusión es que el sol se comporta como hierro y es caliente y sus emisores colores son indicativo de la temperatura en sus varios puntos.  ¿No es pensar aún con la "mentalidad de la Tierra plana"?  Mejor sería enviar una sonda espacial al sol y medir su temperatura? …

Veamos… Creo que no soy el único que lee cosas raras en este texto. Por ejemplo, se nos explica que los científicos dicen que el sol está muy caliente, porque su color les recuerda al del hierro fundido (que evidentemente, está muy caliente)… Una afirmación absurda y gratuita sin duda. Es verdad que el color de la luz nos indica la temperatura aproximada de una estrella, pero de ahí, a afirmar que se dice que el sol es muy caliente porque su luz tiene un color similar a la del hierro fundido…

Vayamos por partes. Primeramente, hay que aclarar una cosa. El color de una estrella (su espectro de luz) nos indica la temperatura de esta, es cierto. Las estrellas rojas que se pueden hallar en nuestro universo (las enanas rojas como Gliese 581) son estrellas pequeñas, con una masa bastante inferior a la del sol (en algunos casos, con 4 o 5 veces menos masa). Esas estrellas son rojas, pues su temperatura es menor. En el otro extremo del espectro, tenemos a las estrellas gigantes. Una gigante azul (como su nombre indica) brilla con una luz azul muy intensa. Para poseer dicho color, esta necesita una temperatura muy superior a la de nuestro sol. Las gigantes azules, normalmente viven unos pocos millones de años, y estallan creando un Púlsar o estrella de neutrones.

Ahora, vayamos al sol. Una estrella que brilla, no con un color rojizo o un color azulado… sino con un color amarillento. Este color amarillo, nos indica que la temperatura del sol es más elevada que la de las estrellas enanas rojas, pero inferior a la de las estrellas azules. Es decir, una temperatura intermedia. Esa temperatura es de unos 6.000 ºc en la superficie, y de unos 15.000.000ºc en el núcleo solar. Esas temperaturas son muy superiores a las del hierro fundido. De hecho, este hierve a unos 2.750ºc. El poco hierro que posee nuestra estrella lo hallamos en estado gaseoso (bueno, en realidad, en estado de plasma, pero ya se me entiende, supongo…). Este personaje no puede afirmar tan gratuitamente como hace que los científicos afirman que el sol es caliente por eso del hierro… De hecho, de lo que menos tiene el sol es hierro y elementos pesados. Nuestra estrella, como¿No es pensar aún con la "mentalidad de la Tierra plana"? Mejor sería enviar una sonda espacial al sol y medir su temperatura? … toda estrella, está formada generalmente por Hidrógeno y Helio. Existen trazas de carbono, de Magnesio, y de hierro (entre otros elementos), pero estos son simples remanentes de la muerte de otras estrellas, mucho más masivas que nuestra estrella, que generaron esos elementos en sus núcleos, expulsándolos luego al espacio. Eso, pero es otro tema.

Está claro, pues, como los científicos calculan la temperatura de nuestra estrella. Ahora, pues hay que ir a la segunda parte de esta pregunta. Recordemos la segunda parte de la pregunta 3…:

¿No es pensar aún con la "mentalidad de la Tierra plana"? Mejor sería enviar una sonda espacial al sol y medir su temperatura? …

Pues claro que si!! Que gran idea!! Ah, espera un momento… Si eso ya se ha hecho en unas pocas de ocasiones!! Misiones como el SOHO (tenemos una imagen suya debajo de esta frase), que se han puesto en órbita alrededor del sol para estclip_image001udiarlo en profundidad… Evidentemente, no podemos lanzar una sonda dentro del sol, o a menos de unos pocos de millones de km de este, pues el intenso calor y las radiaciones que nuestra estrella emite, la destruirían. Las conclusiones que han sacado todas las misiones que se han hecho, con nuestro astro rey como protagonista, han llegado a la conclusión que este, es un astro muy activo, con continuas emisiones de viento solar, con tormentas en su superficie, y fenómenos de todo tipo. Toda esa actividad, refleja una vez mas la enorme cantidad de energía (y por defecto, temperatura) que ese cuerpo posee.

Claro que, para llegar a esa conclusión, un amateur como yo mismo, con un pequeño telescopio solar y un poco de interés, puede llegar sin demasiado esfuerzo mental.

Afirmación número 4:

Durante la formación de los soles y galaxias los cambios de presión crean cambios de temperatura que pueden elevarse a súper calor siguiendo leyes termodinámicas, pero en el estado estable tal como en un sol maduro, los átomos en un estado de plasma son realmente fríos. El plasma es frío, no caliente. El efecto fotónico de cambio de estado de átomos excitados a átomos relajados en el plasma causa la emisión de fotones, los cuales son la luz solar que vemos. Actualmente la ciencia no está en condiciones tecnológicas de probar este hecho. El sol es formado por plasma de átomos de hidrógeno, helio, y otros. Pero el sol es hueco y la capa de gases no es tan profunda como para lograr las temperaturas de millones de grados producidas por el peso de los átomos compactándose y generando altas temperaturas por leyes termodinámicas. (Presión genera temperatura).

Afirmaciones gratuitas, las que quieras, eh?? A ver… Afirma que el plasma es caliente en la formación de la estrella, pero niega que eso sea una vez llegada la madurez del astro… Afirma entonces, por lo menos, que en un inicio, la estrella está caliente. Muy caliente, de hecho. Pero luego no… Un poco contradictorio, no? Si la estrella empieza a brillar cuando su núcleo alcanza una temperatura de millones de grados, y una presión de millones de atmósferas, eso debe mantenerse para que la estrella siga brillando!! La fusión nuclear, como nos hemos hinchado ya de comentar, necesita mucha energía. Esta (representada esquemáticamente a la derecha), se manifiesta en forma de calor. A menos calor, menos energía. Y a menos energía, llega un punto en el que la estrella ya no puede hacer fusión nuclear, por lo que no genera energía con la que brillar. Sin elevadas temperaturas, no hay fusión nuclear. Si seguimos el razonamiento de este individuo, el sol debería haber cesado su brillo hace miles de millones de años, y nosotros no estaríamos aquí. Ni él hubiese nacido (por lo que no hubiese escrito ese “artículo”) ni yo habría nacido (ni refutado su “artículo"). La tierra no poseería vida (o por lo menos, vida compleja o con la luz solar como base).

Luego, y lo que más divertido de esta pregunta, es que se dice que la ciencia no posee las herramientas necesarias para conocer si el plasma solar es o no caliente. Contradecirse a si mismos, es una característica típica de los conspiranoicos… Si no poseemos las herramientas necesarias para medir la temperatura del plasma solar, como sabe este personaje que éste es frío? Sólo él tiene las herramientas necesarias para medir eso? Es quizás vidente? Una especie de Aramís Fuster a lo astrónomo? Venga hombre, no me hagas reír! Si que poseemos esas herramientas (telescopios, sondas, ordenadores, etc.) y esas, nos indican justo lo contrario a lo que tú nos dices. Bueno, eso y el sentido común. Aunque, como este a veces puede resultar traicionero, en estos casos hay que acudir a la ciencia y a las pruebas que esta nos aporta.

Pregunta número 5:

La temperatura en su superficie se dice que es de miles de grados, y la temperatura interna es supuestamente en los millones de grados. Sin embargo, es inexplicable cómo pueden actuar magnéticamente los gases súper calentados. Porque es un hecho elemental de la física que una sustancia pierde su magnetismo ¡cuando es calentada! Ya que los astrónomos han registrado definitivamente los efectos magnéticos sobre el Sol, tenemos un conflicto directo entre la verdadera naturaleza del Sol y la temperatura sugerida!

Bueno… Hay que reconocer que la mayor duda que se nos puede plantear en todo el texto, es esta. Aunque sigue lejos de ser una pregunta sin respuesta, o con una respuesta muy compleja. Nada más lejos de la realidad.

Para entender esta pregunta, hay que pensar antes en los planetas. Como es que hay planetas como la tierra que poseen campo magnético, y otros, como marte, que no lo poseen? Pues por su núcleo. El núcleo terrestre, como podemos ver en una erupción volcánica, por ejemplo, está fundido y activo. A miles de grados, los materiales del núcleo terrestre, generan un campo magnético al rotar junto al resto del planeta. De hecho, eso se ha podido reproducir en los laboratorios. La rotación de la tierra, con el material fundido, genera el campo magnético que nos protege de las radiaciones solares más peligrosas. En Marte, por ejemplo, la cosa es distinta. Es un mundo muy pequeño, que no posee materiales radioactivos suficientes como para fundir la roca, y mantener el núcleo fundido. Al ser sólido, ese núcleo no genera un campo magnético que defienda a la superficie de las peligrosas radiaciones.

En el caso del sol, siendo una gran “bola” de plasma como es, el campo magnético que puede generar, es mucho mayor al de cualquier planeta. El campo magnético solar se extiende alrededor de 1,5 años luz a la redonda, más o menos, 1/3 de la distancia que nos separa de Proxima Centauri (la estrella más cercana al sol). Es falso que a gran temperatura, el magnetismo desaparezca. Es una afirmación falsa, que nos lleva a una conclusión errónea.

Pregunta número 6 (y la definitiva):

Algunas prominencias viajan a la increíble velocidad de 450 millas por segundo y alcanzan una altitud de un millón de millas; esto es, ciento noventa y un mil millas más que el diámetro del Sol. Para sumar a la rareza de este fenómeno está el hecho de que estas prominencias se elevan a alturas fantásticas, y entonces solo se "cuelgan" a mitad de aire, sin soporte, ¡en completo desafío a la ley de la gravedad de Newton!"

Las prominencias nos suministran con alguna prueba más para la conclusión de arriba. Estas prominencias se dicen ser explosiones de gas hidrógeno y aparecen primero en la fotosfera del Sol. Hay muchas teorías, pero hasta ahora los astrónomos han estado perplejos sobre su origen. El comportamiento de estas llamadas nubes de gas de hidrógeno contradice una de las más viejas y supuestamente, más estables leyes de física ..., la ley de la gravedad de Newton.

Bueno, aquí llega la última respuesta. Se podrían haber desmentido más cuestiones de ese texto, pero creo que no vale la pena. Supongo que con estas seis hay más que suficiente para desmentir esa conspiración absurda.

Por cierto, esta cita, para mi, es la más fuerte. Ahora resulta que la ley de la gravedad de Newton presenta ciertas dudas!! No será que esas dudas se te presentan sólo a ti, lumbreras?? Ahora ya no basta con afirmar que el sol es frío…

Las prominencias de las que Luís Prada nos habla, son arcos de materia, que se elevan a alturas que equivalen a 2 o 3 tierras puestas una encima de la otra… Miles de km de altura (que no millones de millas)… Esas prominencias son tormentas solares, en las que la materia se eleva siguiendo el campoclip_image002 magnético solar. El mismo campo magnético que no debería de existir en el sol según este personaje!! Antes de nada, hay que decir que de estas prominencias hay de distintos tipos. Todo depende de la energía que los genere. A mayor energía, mayor masa y mayor altura de esta. Hay tormentas solares, que generan tanta energía que superan a la gravedad, haciendo lo que se conoce como Expulsión de Masa Coronárea. En ellas, la columna de material ascendente se eleva tanto que esta se rompe. Con ello, el material que se ha desprendido se aleja del sol, y sale despedido al espacio. No es difícil de entender, de hecho, nosotros usamos el mismo principio para lanzar cohetes al espacio. Para salir de la Tierra (o de cualquier astro), primero hay que generar una energía suficiente para vencer la gravedad de este. Una vez generada la energía necesaria, el objeto que asciende, puede salir al espacio. En el caso del sol, es igual. La única diferencia en el caso del sol es que, para escapar a su gravedad, se necesita una energía mucho mayor. La gravedad Terrestre, es de 9,8 m/s2, mientras que la del sol es de unos 273 m/s2. La diferencia de gravedad es notable. Por eso, se necesita mucha energía para escapar a esa gravedad. Energía que sólo generan las tormentas solares más potentes.

Por cierto, hay que destacar una cagada más que notable del autor en este fragmento de texto. Esa errada nos confirma la fiabilidad de este personaje. Dice que las prominencias que se generan en una tormenta solar, alcanzan millones de km de altura, colgando en medio de “aire”. En el espacio no hay aire! No hay nada, de hecho. El espacio exterior es un gran vacío. De hecho, la densidad media del universo es de 1 átomo/m3… Y eso que hay grandes concentraciones de masa en estrellas, cúmulos, galaxias, etc… Después de ese detalle, vayamos a aclarar un par de cosas;

1- Esas prominencias alcanzan grandes alturas, pero no millones de km. Las que llegan a esas alturas, ya no son prominencias, sino material que ha salido despedido hacia el espacio exterior, y que se aleja del sol a gran velocidad a causa de la enorme energía que las ha generado.

2- Que las prominencias en cuestión formen arcos en el cielo, y formas exóticas, no es ningún misterio. El ya famoso campo magnético solar, es el causante. Nuestra estrella, al igual que nuestro planeta, rota. Pero esa rotación es un tanto caótica. Al carecer de superficie sólida, nuestra estrella rota más rápido por el ecuador, que por los polos. De hecho, hay una diferencia de unos 5 o 6 días entre el ecuador y los polos solares. Eso provoca que el campo magnético se enrede y deforme, creando arcos. En las tormentas solares, el material ascendente sigue esos arcos magnéticos, regresando después a la superficie solar. Sólo en las mayores tormentas, el material asciende demasiado, y sale despedido al espacio.

Entonces… Donde está la duda sobre la gravedad de Newton? Realmente era un desafío a la gravedad de Newton? Pues NO.

Hay que ir muy en cuidado con estos “monstruos” que corretean por internet, pues pueden llevarte al huerto. Hay que ser crítico con todo lo que se lee (siempre con cierta medida, evidentemente), pues por lo contrario, pueden convencerte de cosas que no son ciertas, o que están basadas en mentiras y afirmaciones gratuitas.

Ya para terminar, solo una cosa más. Si lees esto, gracias. Si has llegado hasta aquí, probablemente habrás leído antes todo lo anterior. Eso demostraría que este escrito no está hecho en vano.

Un saludo, y hasta pronto!!

Destruyendo afirmaciones estúpidas: El sol es frío (Parte 1)

Buenas!!

Antes de nada, quiero explicaros el porqué de este artículo. Esto no habla sobre los mundos extraterrestres que podemos hallar por toda nuestra galaxia, sino de eliminar uno de esos mitos pseudocientíficos que infectan nuestra sociedad. Desde internet, mucha gente, que afirman ser científicos, con títulos y carrera, afirman cosas que, incluso alguien con unos conceptos de física y cosmología tan vagos como yo, es capaz de destruir sin demasiado esfuerzo. Sencillamente, con un poco de sentido común y algunos datos que están al alcance de todos, y muy fáciles de entender. Hay muchos bulos y mitos en el tema de la astronomía, como la conspiración lunar, los OVNIS, las abducciones extraterrestres, etc. Pero hoy, hablaremos sobre una afirmación que ha salido recientemente por las redes: El sol es frío. Con una temperatura que no supera los 4ºC…

Hace unos días, Edgar Luís Gómez, creador y editor del blog Opinando Sobre el Mundo, contactó conmigo a través de un foro de astronomía concretamente el de Sondas espaciales (del cuál soy usuario), y me propuso de hacer un artículo entre los dos. Un artículo para desmontar una farsa recién nacida (recién nacida a pesar de que el artículo fecha de 2003…), una farsa que afirma que el sol es frío, cosa que si pensamos detenidamente, es una tontería. Porqué hace más frío en Neptuno que en Mercurio?? Simple, la respuesta está en que uno está ubicado a unos 4.000 millones de Km de nuestro astro rey, y el otro, apenas a 70 millones de Km…

En fin… Antes de empezar, quiero daros una advertencia, queridos lectores, y es que, jamás hay que creer ciegamente todo aquellas teorías que nos aportan los medios de comunicación. Hay que estar siempre abierto a las nuevas teorías, por supuesto, pero siempre hay que tomar una mirada crítica, y analizar aquello que se nos presenta. Si aceptamos una cosa a la primera, sin ni siquiera pensar un poco en ello, somos víctimas potenciales de las mentiras que corren por internet. Mentiras que, muchas veces, tienen como objetivo ganar dinero fácil. Nosotros podríamos empezar a escribir artículos afirmando que los alunizajes fueron una farsa y cosas así, y estoy seguro que, en un par de meses, habríamos multiplicado nuestra audiencia por 5 (como poco…). Pues es muy fácil decir que vivimos en un engaño y hacer teorías de todo tipo, mucho más que pensar en el porqué de las cosas. Porqué el sol es caliente, y no frío? Porqué podemos afirmar tranquilamente que el hombre si llegó a la luna? Pues por las pruebas. Pruebas que se nos presentan de distintas fuentes, y que podemos contrastar. Eso sin contar que las teorías de la conspiración lunar (por ejemplo) se contradicen ellas mismas, y son de fácil explicación. Pero no seguiremos con ella, pues ahora hay que empezar a hablar sobre el tema que hoy nos ocupa.

A desmentir toca, pues! Lo haremos paso a paso, por puntos. Hemos dividido este artículo en citas, que responderemos una a una.

Primera afirmación del texto (lo destacamos en negrita, para evitar confusiones de ningún tipo):

-El sol es realmente frío, contrario a lo que la ciencia oficial dice.

Como prueba real, el espacio exterior expuesto a los rayos del sol sin ningún bloqueo de la atmósfera es realmente extremadamente frío a aproximadamente 3 o K (-273 o C), el agua se congela a aproximadamente 4 o C. ¿Por qué no es extremadamente caliente, ya que cuando el sol es resplandeciente, en verano por ejemplo, y no hay nubes es caliente afuera?

Veamos… Primera afirmación, clara y contundente del autor de este texto (Luís E. Prada). “El sol es realmente frío, contrario a lo que la ciencia oficial dice…” Aquí, nuestro buen amigo ya la ha cagado. Para empezar, eso de la “Ciencia Oficial”, no existe. La ciencia es la que es, pues los fenómenos del cosmos son los que son. De hecho, sólo hablan de “ciencia oficial” aquella gente que podríamos tachar de “conspiranoicos”. Esa palabra la usaré en más de una ocasión, haciendo referencia a gente como Prada, que niegan cosas evidentes. Gente que niega la llegada del hombre a la luna, que afirman que el sol es frío, o incluso que la tierra es plana (entre otros ejemplos)… Esa gente es la que yo (como muchos otros) llamaré conspiranoicos. Son personas que pretenden hacer creer al lector que ellos tienen la verdad absoluta, y que toda la comunidad científica son unos mentirosos que sólo pretenden engañarnos.

En fin… A lo que íbamos. El principio de la cita, no podía ser peor, pero lo que le sigue es aún más horrible. Se nos afirma que el espacio es realmente frío, a aproximadamente 3 K de temperatura (rectifico al autor: 3K son -270ºc, no -273ºc, aquí ya se nos demuestra su rigor). Veamos… La temperatura media del universo, es realmente de 3k, pero eso no significa que TODO el universo posea esa temperatura. El universo es un lugar dantesco, enorme, y las estrellas, que son la única fuente de calor de este. El cero absoluto, es decir, la temperatura más baja que podemos hallar en el universo, se halla en los –273,16 ºc. solSi la temperatura media del universo es de unos -270ºc, esos 3 ºc de más, de donde salen? Pues del calor de las estrellas, que, a pesar de que hay miles de Billones de ellas en el universo, hay muy pocas en comparación con los vastos espacios vacíos (de millones de años luz entre galaxias), en los que no hay, o apenas hay estrellas. Para poder elevar la temperatura media del universo esos 3 k, tiene que haber algo caliente, en suficiente cantidad para poder influir tanto en el total del universo y su temperatura. Ese algo, son las estrellas, y una estrella entre los miles de millones que hay sólo en nuestra galaxia, es el sol. Una estrella enana amarilla, típica y normal en nuestro cosmos. Una más, que nos da la vida.

Si el sol fuera frío realmente, nada nos daría calor en el universo. Es decir, que nuestro mundo, que por si solo no tiene capacidad de generar calor suficiente para mantener la temperatura media del planeta en unos 15ºc, no poseería vida. Si el sol no nos calentase, nuestra temperatura seria casi igual a la del espacio exterior, y los mares, los líquidos en general, incluso la atmósfera, se hallarían en estado sólido. El nitrógeno y el oxígeno de nuestra atmósfera se hallarían en estado sólido, creando una capa de hielo de unos pocos metros alrededor de todo el globo. La vida sería imposible. Para que haya vida tal y como la conocemos, necesitamos una fuente de calor muy potente, es decir, el sol.

Afirmación número 2:

El Viento Solar Es Plasma - El Plasma Espacial Todavía No Puede Ser Duplicado en el Laboratorio

Veamos… Que tiene que ver que el plasma no pueda ser duplicado (cosa que no sé si es realmente correcta) con que el sol es frío? De hecho, el plasma se halla en condiciones extremas. En la tierra, también podemos hallar plasma, de hecho. Los rayos, generan una gran descarga eléctrica, excitando a los átomos de Nitrógeno y Oxígeno, hasta el punto de elevar su temperatura a miles de grados. Entre 15.000 y 30.000 ºc… Esa temperatura es bastante superior a la que podemos hallar en la superficie solar. Erayosa rápida elevación de las temperaturas, provoca una enorme onda expansiva, que genera el característico sonido que escuchamos durante una tormenta. 

A enormes temperaturas, como las que hallamos en el sol, la materia deja de comportarse como si fuese un gas. De hecho, tiene un comportamiento distinto al que tendría en cualquiera de los otros tres estados conocidos (sólido, líquido y gas). Ello requiere una energía muy elevada. Lo mas similar al plasma solar que podemos hallar en la tierra, de hecho, es el rayo, como he explicado hace un momento. Quizás otro fenómeno que podemos decir que genera plasma, es el fuego. Mucho mas conocido para nosotros, puede poseer temperaturas de hasta 1000ºC, y en él, los átomos de Nitrógeno y de Oxígeno del aire, se excitan hasta el punto de emitir energía en forma de luz y calor. En el caso del fuego que podemos hallar en nuestro hogar, por ejemplo, usa la leña como combustible. La reacción de la madera con el oxígeno del aire genera una elevada temperatura.

En el caso del sol, el combustible es la fusión nuclear. Hace tanto calor, y hay una presión tan elevada en el núcleo de nuestra estrella, que los átomos de Hidrógeno chocan con la fuerza suficiente como para unirse. Hay que pensar que el núcleo de un átomo está hecho por protones, todos ellos de carga positiva (también hay neutrones, sin carga), que se mantienen unidos. Como puede ser eso? En teoría, dos cargas positivas deberían repelerse. Para mantenerse unidos, se necesita una gran energía. Sin esa energía, llamada energía nuclear fuerte, esos protones saldrían despedidos. En el núcleo del sol, los átomos de H2, se fusionan para dar Helio. Eso despide gran energía, energía que lleva alimentando a nuestro sol y nuestro planeta unos 4.500 millones de años, que se dice pronto. También requiere gran energía, por supuesto. Por ello, el núcleo solar posee una densidad 10 veces superior a la del plomo, y una temperatura de unos 15 millones de grados. Porqué explico esto? Pues por un hecho muy simple. La temperatura de un objeto nos indica al cantidad de energía que poseen los átomos de estos. Más temperatura, más energía. Y para la fusión nuclear, se necesita mucha. Una cantidad inmensa de energía.













13 noviembre, 2010

Mensaje del equipo de Yplanets

Pedimos disculpas por la falta de publicaciones recientes en nuestro blog, que son debidas a que tanto mi compañero Iván como yo nos dedicamos a estudiar y a ambos nos consume mucho tiempo nuestros estudios. Sin embargo ya pronto estamos recuperando el tiempo perdido y volviendo con el tema que tanto nos apasiona. Los demás mundos del universo.

Por ahora estoy preparando una mega entrada sobre cómo descubrimos los exoplanetas. Una entrada multimedia que permita entender a todo el público, de forma amena, como es que la sociedad actual ha hecho posible esta incipiente nueva ciencia astronómica.

También como son los métodos que nos permiten descubrir los mundos más allá de las fronteras de nuestro Sol. Y hacer un pequeño resumen sobre los planetas más interesantes, desde una perspectiva humana.

Además estoy compilando información para crear una gran base de datos en español sobre información técnica de todos los mundos del universo. Información que, aunque está disponible en muchos lugares, están generalmente en inglés, lo que limita a muchas personas que quieran saber sobre el tema. Esta base de datos será gráfica y dinámica; a fin de ser atractiva y comprensible de un solo vistazo.

Sin más por los momentos, y esperando volver a tenerlos leyendo sobre estas pequeñas piedras flotando sobre nuestras cabezas… me despido

José J. Cedeño